Patinar en el hielo, una costumbre alemana de invierno
El invierno en Alemania es un espectáculo de contrastes, donde el aire frío se mezcla con la calidez de las tradiciones. En esta época del año, los lagos se convierten en verdaderos lugares de diversión, transformándose en pistas de patinaje natural que atraen a familias enteras. Cuando el hielo cubre la superficie de los lagos, la escena es mágica: niños y adultos se deslizan, se ríen y disfrutan del aire fresco.
Anke Käding, Rectora del DSM, recuerda la alegría que sentía al patinar en su juventud. “Cuando había temperaturas bajo cero, los lagos se congelaban, y después de una prueba por parte de la policía, podíamos patinar”, comparte. Para ella, la experiencia era una celebración familiar, un momento especial en contacto con la naturaleza. “Es algo en la naturaleza, no se siente el frío. Para los niños, es una delicia; se disfruta el frío que hay en el invierno”.
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¿Dónde patinar en el hielo?
En Berlín, la temporada de patinaje sobre hielo empieza en noviembre. Ya los lagos no son el centro sino las pistas, permitiendo que tanto grandes como pequeños disfruten de este típico deporte invernal. Los mercadillos de Navidad en lugares como Alexanderplatz o Potsdamer Platz, son populares en diciembre. La ciudad se llena de vida con diferentes tipos de pistas, ya sean al aire libre, cubiertas o parcialmente cubiertas.
La Eisbahn Lankwitz es una de las mejores pistas al aire libre, perfecta para quienes desean practicar el patinaje, independientemente de su nivel de habilidad. Esta pista ofrece un espacio para patinar y también tiene instalaciones para hockey sobre hielo y curling.
Otra opción encantadora es la Eisbahn im Seebad Friedrichshagen, situada junto al Grosser Müggelsee. Ofrece impresionantes vistas al lago y un bar que atrae a patinadores de todas las edades.
Para quienes buscan una experiencia diferente, el Zenner Wintergarten ofrece una pista de hielo cubierta, ideal para patinar con tranquilidad. Cada fin de semana se celebran sesiones de Eisdisko con DJ, creando una atmósfera festiva que invita a los jóvenes a disfrutar de la música y el hielo.
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El patinaje sobre hielo en Alemania es una mezcla de tradición, alegría y comunidad. En cada giro y en cada caída, se manifiesta un sentido de pertenencia que une a las personas con su entorno y entre sí. Ya sea en los tranquilos lagos congelados o en las animadas pistas urbanas, esta actividad perdura como un símbolo de la temporada invernal, donde el frío no es un obstáculo sino una oportunidad para disfrutar de momentos inolvidables.